¿Hitler estuvo en la Patagonia?

Por: Patricia Lee Wynne

Para el periodista argentino Abel Basti el Führer huyó a la Patagonia argentina para esconderse en una casa de montaña inaccesible por tierra. Basti defiende esta versión en sus libros El Exilio de Hitler, Hitler en Argentina y Los Secretos de Hitler.

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“La historia oficial occidental dice que Hitler se suicidó, pero los soviéticos hablaban de que Hitler había huido del búnker. El mismo Stalin, en 1945, pidió la inclusión de Hitler en la lista de criminales a ser juzgados en ausencia en el juicio de Núremberg”, dijo Basti, que lleva 20 años investigando el tema, a Sputnik Nóvosti.

Según su versión, el sitio principal donde estuvo Hitler fue una casa de montaña, conocida como Inalco, edificada cuando terminaba la guerra, a 80 kilómetros de Bariloche. El lugar era inaccesible por tierra y solo se podía llegar en hidroavión o barco.

“La casa tiene ciertas características que no hacen a una estancia patagónica, como antenas de radio, puestos de seguridad, y la imposibilidad de llegar vía terrestre. Traté de reconstruir esto con base en testimonios y  elementos importantes, como los registros de los aviones y la presencia de pilotos nazis”, señala Basti.

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Según él, los planos originales están en alemán, con lo cual se muestra el perfil del emprendimiento.

El escape de Hitler habría sido por vía aérea a Austria, desde donde habría viajado a España, y de allí a la Patagonia en submarino, opina Basti, quien  tiene un juicio contra el Estado argentino para que desclasifique la información perteneciente a la Armada, que demostraría el ingreso de nazis y en particular de Hitler a Argentina.

Hitler habría vivido primero en la estancia San Ramón, que pertenecía al principado alemán de Schauburg Lippe, la familia de Bernardo, el esposo de la reina Juliana de Holanda, que fue parte de las SS nazis. La casa pasó después a manos de la familia Lahusen, vinculada al nazismo. De allí, Hitler se habría trasladado a Inalco, donde habría vivido entre 1947 y 1949, y después habría huido al Paraguay, donde habría muerto en los años setenta del siglo pasado.

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Basti basa su afirmación en documentos de época y en más de treinta testigos, pero cree que el gobierno argentino no quiere desclasificar la información, porque “hay una trama de complicidades”, ya que la huida de los jerarcas nazis habría sido producto de “un acuerdo militar con Estados Unidos”, que luego “recicló” miles de científicos para sus planes nucleares y militares con el fin de combatir al comunismo.

La presencia de Hitler en Argentina ha sido refutada por las autoridades soviéticas que recuperaron el cadáver del Führer y por muchos historiadores y testigos de los hechos. Pero de lo que no hay duda, es de la presencia de criminales nazis, algunos de los cuales sirvieron de asesores a los gobiernos dictatoriales de la región en los años setenta, como Klaus Barbie, el Carnicero de Lyon, que vivió en Bolivia bajo el nombre de Klaus Altmann, fue descubierto en 1983, extraditado a Francia y juzgado por la deportación de cientos de miles de judíos a los campos de concentración.

Fuente: Sputnik